lunes, 22 de octubre de 2007

AUTOEVALUACION

Bueno, en estos momentos me considero que esta maeria aporo elementos muy buenos para mi carrera, no soy he sido muy bueno en esto del la lectoescritura pero en este camino de aprendizaje me fue muy bien, considero que la constancia y el interes por ella ha hecho que responda con buenos resultados, puedo decir que meresco un 4.0, de todoas formas el profesor es quien tiene las apreciaciones mas esactas, de todas formas agredesco su tutoria.

Jonathan Gáuna Vargas Cod: 2075856

domingo, 21 de octubre de 2007

mi nota debe ser (Armando Ernesto Cañas Pinto)

mi nota debe ser 3.5

apesar que he realizado los trabajos, considero que tengo muchas cosas por mejorar, necesito aprender a manejar las tildes mejor, tengo dificultades para poder redactar un texto, me toca revisarlo demasiado e incluso a veces he sentido la necesidad de consultar si estan bien o no algunas partes de los escritos por dudas que me nacen acerca de la correcta construccion de los textos.

me cuesta entender los enunciados y las preguntas muchas veces por mi propia distraccion, me toca leer varias veces para poder comprender las ideas que los textos me quieren dar a entender, es necesario poder seguir forjando la actitud lectoescritora para el futuro.

jueves, 18 de octubre de 2007

Autoevaluación

por:
José Ricardo C0ntreras Gonzalez

consedero que mi calificacion en la historia lecto-escritora debe ser 3,8, por las siguientes razones:

-auque reconosco que cometi en un comienzo errores de redaccion, los corregi casi en su totalidad.
- Investigue sobre la composicion de una lectura para redactarla mejor.
-segui las pautas dadas por el tutor para realizar el ejersicio.
-entrege a tiempo coda uno de los ejersicios.

no creo obtener una calificacion mas alta, debido a que soy consiente de que tengo aun problemas de redacion y gramaticales por corregir, y por mas que los busco no los encuentro, auque por la dificultad al leer algunas zonas del escrito se que estan presentes.

lunes, 8 de octubre de 2007

MI CORTA HISTORIA

Presentado por: José Ricardo Contreras González

Hace ya casi 18 años en un pueblo del Cesar llamado Aguachica, José Bedarmin Contreras un estudiante de arquitectura se encontraba visitando a su novia Gladis y a su hijo Rubén David de un año de vida, después de una larga ausencia y como era de esperarse fue recibido con todo el amor y el deseo acumulado de casi 6 meses de no estar juntos; estuvieron apunto de estallar. Llegada ya la noche se dirigieron a la habitación, donde por fin saciarían todos sus deseos. Esa noche les dejo un recuerdo del cual nunca podrían deshacer, y aunque así quisieran hacerlo una parte de cada uno de ellos estará con él: “auque ellos todavía no lo saben”.

Pasado un mes ella esta preocupada porque no ha recibido una visita que esperaba con ansias, que nunca falla y creía saber por que. Ya no tendrá que preocuparse por ella y su hijo solamente, ya que dentro de ella tiene un visitante que no esperaba pero que recibe con todo su amor aunque con un poco de temor.

Seis meses después sus miedos se hacen realidad, Luís Hernán Contreras hermano de mi padre es asesinado, esto le deja un trauma gracias a una horrible coincidencia que no se podía explicar, se pregunto muchas veces por que cuando estaba esperando su primer hijo Rubén (también hermano de mi padre) hubiese aparecido muerto y que ahora en ese mismo estado pase una tragedia similar le atormentaba el alma, la lleva a tomar una decisión que la destrozo por dentro, ya no tendría mas hijos y así le tocara tirar a un abismo un sueño que tubo desde niña: tener una hija.

Llego la hora.
Sentada en la vieja mecedora de mi abuela empieza asentir un horrible dolor que la hace gritar desgarradoramente y le hace sentir una mezcla de sentimientos que van de la impotencia a la felicidad. “ya me había aburrido de la oscuridad”. Dos largas horas después por fin sale de la sala de partos Olga, una vieja amiga de la familia que era enfermera del hospital con un niño que sorprendió a todos por que no lloro, y se le veía en el rostro la ganas que tenia de conocer al mundo que lo recibía. Beatriz, hermana de mi madre dijo algo que no es muy común decir cuando ven a un recién nacido “huí, este niño va a ser malo” y hoy creo que no estaba muy equivocada.

Desde muy pequeño siempre me gusto ir mas halla, no me conformaba con jugar con lo que me regalaban, quería saber que había dentro de ellos, saber de que están hechos, lo hice asta con los pañales y cuando me aburrían terminaban debajo de la cama. En la casa de mi abuela tenia un patio gigantesco que se convirtió en lugar de juegos mió y de mi hermano en el cual los pequeños arbustos se convertían en una gigantesca selva, en el que luchábamos con feroces monstruos (las gallinas de mi abuela), por cierto con esos juegos nos ganamos muchos regaños, y siempre terminábamos comiendo pollo al otro día.

En la escuela siempre me fue mal no académicamente, pero en todos los colegios en donde estudie siempre estuve a un paso de ser expulsaran, siempre fui aquel niño que cuando llegaba a la escuela los profesores consentían mucho, yo era el típico gordito chistoso e inquieto que nunca falta en un aula de clases.

En mi casa siempre vi a mi papá leyendo libros de superación personal, yo creí que tenía un trauma o algo así. El primer libro que me dio a leer fue el principito yo tenia como 5 o 6 años no estoy seguro, pero si he de ser sincero no me acuerdo de que trata ese libro. Cuando entre a la escuela y empezaron a enseñar a leer me fue un poco mal debido a que nunca me ha gustado que me impongan las cosas, mis maestras (aunque eran muy buenas con migo, especialmente la maestra flor) siempre decían tienen que leer, tienen que escribir, y en mi concepto eso era una pedagogía errónea, ya que cuando uno es niño solo piensa en jugar, debían hacer que la lectura y la escritura sean un juego y no una tortura.

Por eso ya en el bachillerato cuando me ponían a leer un libro me costaba mucho trabajo debido a que en la escuela nunca me enseñaron a amar la lectura y mucho menos la escritura, si no que me imponían las cosas, lo hacia obligado no por que quisiera. Y eso es gran error. Ya que hoy en día de todos los libros que leí solo me acuerdo de que trataba uno solo “la resistencia” de Ernesto Sabato. El resto de libros me aprendía lo que creía que me iban a preguntar en el examen ¡y eso!.

De todos mis profesores en el área de castellanos en todo el bachillerato con la única que aprendí algo fue con la profesora que tuve en los cursos 9,10 y 11, ya que ella nos explicaba muy bien las pautas para que al hacerlo fuera mucho mas fácil y luego lo único que hacia era supervisarnos, y nos ayudaba a hacer las cosas cada ves mejor.

Desde mis primeros años de bachillerato siempre estuve en un grupo en el cual me sentía diferente a ellos, debido a que mis compañeros tenían ideales que no concordaban con los míos, auque debo confesar que durante un tiempo intente ser como ellos, pero ese no era yo. Fue hasta noveno que empecé a tratar con aquellos que ellos trataban de tontos pero en realidad hoy pienso que los tontos eran ellos, ya que no veían más halla de lo evidente, siempre hablaban de un tema por hablar sin que supieran que era lo que estaba pasando.

Hoy pienso que de todos esos años no me quedaron cosas que me sirvieran para la vida y por eso me gane muchos problemas. Cuando entramos a 11 debido a que ya habían expulsado a todos los del grupo solo nos habíamos salvamos tres (aunque yo ya me había alejado mucho de ellos ya me fastidiaban), yo me sentí mal hasta que me dijo un día mi directora de grupo “somos los que estamos y estamos los que somos”. Ese año hice muchas más amistades y afiance mas la amistad con la que en ese entonces… bueno con la que es mi mejor amiga aunque nos hallamos alejado un poco debido a las circunstancias.

Andrea siempre fue la que me saco de muchos problemas tanto en el colegio como en mi casa ella era mi mamá en el colegio, me vivía acordando de los trabajos y procurando que yo hiciera las cosas bien, también conocí muchos mas amigos, la verdad ese fue el año que mas recuerdo. En ese mismo año conocí a mi novia Geraldine y desde que la conocí me encanto su forma de ver el mundo y descubrí que teníamos mucho en común.

Antes de terminar el colegio mi profesora de pintura me ayudo entrar a un taller que estaba dando el maestro mantilla caballero, al entrar mi visión del arte dio giro de 360º. Aunque de muy niño yo siempre había dicho que quería ser artista, pero al llegar a 11 tuve muchas dudas ocasionado en parte a mis buenos resultados en el examen estado lo cual me abrió muchas puertas, pero hoy estoy aquí.

Cuando empecé a estudiar con el maestro el en un principio el tuvo muchas dudas para dejarme entrar a su taller por mi corta edad, pues en ese entonces yo solo tenia 16 años y todos los que estaban en el taller ya vivían del arte, pero decidió darme una oportunidad. Desde que Salí del colegio mi único fin ha sido prepararme artísticamente tanto en lo practico como en lo teórico, me enfoque a investigar mucho sobre el arte colombiano y me encanto, leí sobre el surrealismo y me enamoro soy un fanático de la obra de los maestros: Jorge Mantilla Caballero, David Manzur, Luís Caballero, Mario Hernández Prada, del extranjero de Francis Bacón (sus caras retorcidas me encantan.) y Salvador Dalí , estoy intentando de armar mi propia biblioteca, ya tengo muchos libro de artistas auque quisiera tener muchos mas.

Mi fin al comprar muchos libros de artistas no es copiar, si no tener un punto de excelencia el cual seguir, y que llegue el día que la gente cundo vea mi obra queden asombrados por su trabajo y no por el nombre del que lo hizo. Yo no quiero la fama, lo que yo quiero es estar satisfecho con lo que hago, que cada obra que haga sea mejor que la anterior y se que solo lo voy a conseguir con mucho esfuerzo y dedicación.

Plan de mejoramiento

El ejercicio de escribir sobre si mismo nos hace conocernos mejor, y recordar momentos de nuestra vida que habíamos dejado en el pasado, sin importar que hubiesen sido buenos o malos, nos permite darnos cuento de muchos errores que hemos pasado por alto, y que nos han traído tantos problemas por no corregirlos, y darnos cuenta de muchas oportunidades que hemos desaprovechado por nuestra ineptitud.

Por eso desde hoy, tengre que aprender a darle el lugar que se merecen a muchos detalles en mi vida que e pasado por alto durante tantos años, a la lectura empezare a dedicar un momento al día para ejercitar este habito, y mejorarlo cada día, a la escritura seguir haciendo este tipo de ejercicios que me ayudan a saber en que me estoy equivocando. sabiendo manejar estos dos artes tan importantes, podré asegurar mi futuro mucho mas facil y rapido que dejándolas a un lado.

viernes, 5 de octubre de 2007

LECTO-ESCRITURA UNA HISTORIA PARA CONTAR



COD:2075856



HISTORIA DE MI VIDA ARTÍSTICA LECTO-ESCRITORA
POR: JONATHAN GÁUNA VASRGAS


El 9 de julio de 1987 nací en medio de dos momentos eufóricos de mi papá, uno era el nacimiento de su primer hijo y el segundo era el partido de Colombia, además mi mamá con complicaciones en el embarazo. Todo fue una conmoción en la familia y en la cuadra del barrio donde yo vivía en Barrancabermeja, era el primer nieto en la familia y el único niño de la cuadra.

Crecí en una casa considerablemente grande, con mis papás y con mi abuela. Vivíamos en el barrio Colombia en Barrancabermeja, teníamos muchos amigos y vecinos con los que hacíamos muchos planes como ir al club que fue hay donde empecé a tener contacto con la naturaleza, en el esta la ciénega de Barranca, los animales como las iguanas, mariposas, chigüiros, y aproximadamente cada ocho días me encontraba con ellos.

La familia y conocidos de mis papas encontraban mucha simpatía en mí, aparte de la inquietante combinación de mis ojos con mi cabello, la hiperactividad que habita en los niños y sobre todo en mi era incansable. Desde ese entonces empezaron a ver que el gusto por el dibujo y el color era muy sobresaliente.

La obsesión mía por los dibujos era tan notoria que siempre estaba buscando un papel para plasmar mi imaginación, y si no encontraba utilizaba las paredes de mi vecina Ruth para dibujar. Con ella y su familia era con quien pasa mayor tiempo, tanto así que se convirtieron como una familia algo así como una unificación, Mazo Villalobos & Gàuna Vargas. Con mi tía madrina, Patricia Mazo fue la que me impulso mis primeros pasos al proceso lecto escritor. Con ella y mis otros tíos y vecinos de la cuadra era con quien jugaba, pasaba mucho tiempo en piscina, en restaurantes del club Miramar, y en cine, desde ahí salio mi gusto por el cine, por el arte. Aparte de eso me gustaba mucho me mi niñera me contara historias, me leía cuentos, pero eso solo fue como hasta los 5 años que fue cuando me vine a vivir en esta hermosa ciudad.

Todo lo que me ocurría era inspiración en mis dibujos, los viajes y paseos familiares eran lo que mas interpretaba. Empecé a ver la naturaleza desde muchos ángulos, pero algo que si me llamaba mucho la atención eran todos los objetos electrónicos.


Tanto así que me fascina viajar mucho en avión, y esta era una de mis inspiraciones mas importantes. Empecé a experimentar más y más y por medio de un curso de pintura que tomaba en el club y con la ayuda de mi maestro, empezó a ver que el arte era una pasión seria.

PRIMERAS LETRAS, PRIMERAS PALABRAS

Con las habilidades que mis padres observaron que ya era tiempo de entrar en el mundo del estudio. Entre primero a Psicopedagógico Barrancabermeja, pero ese colegio me frustro, la maestra nos pegaba por leer, por las tareas, y como todo niño comunicativo exprese a mis padres y logre que me sacaran de ese colegio y me traslade al Psicopedagógico Los Andes, en este si me adapte, hice muchos amigos.

Era una de los colegios mas reconocidos en el pueblo, los profesores eran muy buenos, y es mas recuerdo una anécdota, en la que mis papas no pudieron recogerme a la salida, ya todas las personas se habían ido y solo quedábamos mi profesora, el celador y yo. Ya eran como las ocho de la noche y mis padres no aparecían y vaya sorpresa, termino llevándome mi profesora a la casa en cicla, ya que era el medio de transporte en el que ella solía utilizar, eso nunca se me olvida, pero del no ser por ella ni de imaginarme que hubiese hecho.

Cuando entre a la primaria ya fue en Bucaramanga, continué mis estudios en el Colegio Cooperativo Comfenalco, y allí donde seguí practicando la pintura, y sobre todo en la primaria que uno tiene la posibilidad de hacer la mayoría de los trabajos manuales, que es lo que más me caracterizaba a mí. Participe en concursos de pintura infantil, tanta fue la acogida de mis dibujos que tuvieron el visto de bueno de varios docentes del colegio, y gracias a mi talento con la pintura tuve la oportunidad de empezar a ser reconocido.

Durante la primaria y la secundaria seguí en cursos externos de pintura, ya que esto daba un gran apoyo a lo que poco a poco se iba cosechando como mi futuro inmediato, futuro que la profesora Martha Lucia, de la materia de bellas artes, era muy emotiva con mi trabajo, al punto de llegar a ser el monitor de la materia desde sexto hasta noveno, era llamado el nerd del arte.

De solo recordar a esta profesora me da risa, ella era de las mas pintorescas de la institución, su forma extravagancia al vestir, sus finas joyas, y su cabello, la hacíamos comparar con Walter Mercado, además de su forma tan elegante de hablar.

Aparte de la pintura en el colegio también participe en tamboras, danzas y música, lo que ayudo a que se desarrollara más mi sensibilidad, y mi pasión por el arte creciera con el paso del tiempo. Empecé a darme cuenta que para incrementar mi nivel artístico era importante leer e investigar, pero lastimosamente el proceso de libros en el colegio era poco usado, llegaba el cambio, ahora todo era tecnología y hasta el punto de que la biblioteca era un castigo.

En décimo bachillerato me traslade al Colegio INEM, donde en cuestiones de arte pertenecí a la Filarmónica del colegio tocando el clarinete, en el grupo musical la rondalla y el grupo de tamboras, obviamente sin olvidar en mis ratos libres mi pasión por la pintura. En este caso la lectura paso a otro grado de mayor dificultad, el aprender a leer e interpretar las partituras, y acoplarme a un conjunto de instrumentos que conformaban la filarmónica.

En ratos libres pude satisfacer la necesidad de pintar, pues lastimosamente en el colegio la pintura no tenía un lugar, por eso pintaba en mi casa, cuadros para regalarle a mi mama, abuela y amigos, pero fue tanta la oferta de las obras que me empezaron a llegar propuestas de vecinos y familiares para que les pintara cuadros, así pude vender varios cuadros que hoy en día adornan las paredes de sus casas. Esto era muy significativo, ahora mi arte se volvía un negocio.
Pero lo mas importante era graduarme, por un lado la felicidad de tocar nuevos horizontes, pero era muy doloroso dejar de pertenecer a la filarmónica.
Durante el paso a la universidad, continuo con mi tarea de hacer del arte mi profesión, la lectura también como base de mi vida, pero sobre todo de hacer de ellas mi pasión. Me doy cuenta que no todo puede ser tecnología, que lo básico esta en las hojas, que años tras año deseo emprender, para ser un buen maestro en bellas artes, y aprender a escribir sobre mi, el letras y en lienzos.

AUTOEVALUACIÓN, AUTOCORRECIÓN

A decir verdad no suelo leer, usualmente leo libros de arte, cuentos, pero estoy malacostumbrado, veía solo la lectura como una necesidad mas no como un pasatiempo enriquecedor. En mi casa la mayoría de libros que hay son de medicina, ya que mi papá es el mas los utiliza, de administración y finanzas que son de mi mama y uno que otro de artes, solo utilizados por mi.

En realidad nunca he regalado un libro, pero si me gusta escribir, en momentos de soledad, busco como una forma de desahogar todo mis sentimientos sobre cualquier situación de mi vida. Le escribo mucho a la naturaleza, al amor, pero se que debo mejorar, pues no lo hago de forma correcta, y ese es mi compromiso, resolver todas esas inquietudes que genero cuando escribo, y empezar a verla de una forma divertida pero constructiva para mi vida, para el bien de mi carrera, por que leer y escribir es un cuento, digno de leer y aprender.

jueves, 4 de octubre de 2007

German Parada

GERMAN ENRIQUE PARADA DÍAZ
Durante la década de los 80s el mundo continuaba separado por dos bloques políticos e ideológicos claramente diferenciados, uno de esos capítulos se vivió en el año de 1988 cuando Afganistán en cooperación con EEUU trataban de poner fin a la invasión soviética. En el marco de esa guerra y al otro lado del mundo, naci yo, Germán Enrique Parada Díaz, en el municipio de Socorro, al sur del departamento de Santander.

Me crie como el menor de tres hermanos bajo la custodia de mi papa Germán Parada Vega y de mi mamá Yolanda Díaz García, en compañía de mis hermanas Andrea y Liliana. Mi mamá de profesión filóloga ejercía la docencia en una escuela en la zona rural del Socorro, mientras que mi papá se desempeñaba como director del Inpec en el Socorro, el permanecía en la casa fiscal escoltado por culpa de las continuas llamadas amenazantes. Mi mamá lidiaba con una niña de 5 años, una de 3 y un recién nacido para ir a la casa de mi papá ubicada en las afueras del Socorro, limites con San Gil.

Mi mamá solía llevarme al campo a su trabajo pero cuando ya no pudo me dejo a cargo de una niñera llamada Marina, con ella el tiempo no era muy grato, por que no me dejaba hacer nada, ni ver televisión, ni jugar lo único que podía hacer era mirar por la ventana a esperar que mi mamá llegara.

Mi casa era pequeña, había un pórtico que para aquellos tiempos era enorme, una modesta sala, en frente una alcoba que compartían mis hermanas, luego el cuarto de mis padres, la cocina, la sala de televisión y en lo mas profundo mi cuarto que quedaba justo al frente del baño en el fondo de la casa. Recuerdo que estaba con mis papás viendo tv cuando me levante a molestar cuando un televisor de 27 pulgadas me cayó encima, y como si el golpe no fuera suficiente mis papás utilizaron conmigo el clásico castigo de la correa.

Cuando entré a preescolar me caracterice por ser muy inquieto, era el único que no se dormía, despelucaba a todos cuando los peinaban, tiraba las cosas, no me concentraba. Luego en kínder, ya en el colegio recuerdo que siempre estaba en las mesas de atrás con otros niños, esos éramos las ovejas negras según las profesoras y que teníamos problemas de aprendizaje. Sufría de incapacidad de concentración, tuve muchos tratamientos psicológicos inconclusos, el más reciente fue hace dos años, pero aun así sigo con esa falencia. En el colegio mi hermana mayor era la encargada de la cafetería y recuerdo que mis amigos y yo le robábamos todo lo que podíamos y ella era quien pagaba los platos rotos.

En mi casa existía una enorme biblioteca con muchos libros y enciclopedias, allí me interesé por la geografía y la historia y a los 7 años ya concia el mundo sin haber salido de mi casa, cuando mis papas se ausentaban, me dejaban a cargo de mi tía Ema, ella que vivía en una gran casa antigua con un enorme patio, un solar que daba hasta la calle del otro lado, en compañía de mi abuela y de mi prima. Ella solía patrocinarme en cualquier capricho que en mi casa no podía hacer por que mis rigurosos padres me impedían todo. Mi tía nos compraba pinturas a mi prima y a mi para entretenernos mientras ella no estaba, pero a mi mamá no le gustaba eso por que alegaba que me ensuciaría la ropa. Mi tía consiguió que tomara clases con el maestro Arcángel Castellanos y desde allí me empecé a interesar en el mundo del arte.

Durante el colegio según los profesores siempre fui el niño bueno, pero para los demás era una caspa que solo me toleraban en la casa, digamos que me ayudaba el hecho de que mi papa era docente de esa institución y que yo era un mentiroso muy convincente, aprovechando esa habilidad entré exitosamente en varios grupos de teatro. Mis profesores de primaria eran típicas señoras solteras, sin hijos, grandes e imponentes, siempre con una gran regla en la mano y una voz gruesa que bien podría asustar al mismo diablo. Mi colegio era grande, existía unas palmeras enormes que sobresalían de cualquier edificio y arriba se encontraban muchos murciélagos que con mis compañeros solíamos tirarles piedras, también había dos canchas grandes, el edificio de salones que mas parecía un laberinto, el auditorio mayor y debajo de este el famoso túnel que lo llevaba a uno a cualquier parte de acuerdo con el rumbo que uno tomara. Estaba en sexto cuando, por fin termine de leer mi primer libro: el lazarillo de tormes una novela picaresca de me gusto mucho, ahí seguí leyendo obras como el jugador de Dostoievski, el coronel no tiene quien le escriba de Gabo, Pasos perdidos de Carpenter, el túnel de Sábato, La divina comedia de Dante, la celestina de Fernando Rojas, El cid, los nibelungos, un marido para mamá, Charlie y la fabrica de chocolates, cuentos de Aníbal Niño, etc. etc. etc. Recuerdo que todos los martes me hacia el enfermo y me iba para mi casa, aquel año no asistí a ninguna clase de ética, educación artística y religión.

Ya en 11 grado como proyecto decidí enfocarme hacia la expresión pictórica, me convertí en el director del proyecto, tuvimos grandes éxitos como ponentes en el foro regional de competencias ciudadanas y la publicación de gran material, pero también tuvimos grandes falencias como la vez del taller del graffiti en otro colegio, allí gracias a mi mamá tuvimos la oportunidad de aplicar ciertos talleres, teníamos aerosoles y estábamos trabajando en una capilla que es patrimonio histórico de la ciudad, cuando los muchachos en un descuido muestro rayan todas las columnas, nunca me había visto tan furioso, el proyecto tan glorioso y tan relevante se había convertido en un dolor de cabeza, después de haber salido en el canal regional por la relevancia del proyecto estábamos condenados por que en el periódico departamental en la sección de regional sur nos hizo ver como inconscientes y realizadores de sacrilegio, después por un comunicado del rector y de mi mamá(coordinadora en la institución en donde se hizo el daño) se solucionó el percance.
Me graduaba y existía el dilema que en que me iba a desempeñar, yo insistía que cine, pero a mi familia no le sonaba mucho esa idea, siempre alegaban que iba a hacer, que no tenia futuro en eso, etc. Etc. Etc. Asi que mi papá me dijo: “o estudia diseño gráfico o no estudia nada” entonces ingrese a esa carrera en la UDI, me fue muy bien allá, fui ponente de los salones de diseño que hicieron durante mi trascurso en esa institución, tuve un promedio por encima de 4, pero al llegar al tercer semestre en la mitad sin previo aviso lo cancelé, me quedé sin hacer nada, luego viajé a Bogotá a aventurar, trabajé un tiempo en un colegio, hice un preuniversitario y un semestre después me encontraba estudiando en el Politécnico grancolombiano, allá me la llevé muy bien con mis compañeros, aunque resultaba costoso salir con ellos, pero me alcanzaba para mantenerme. Me toco regresarme de nuevo a estudiar diseño otra vez en tercer semestre, lo culminé pero esta vez quede PFU, realmente en ese semestre no hice nada. Al terminar todo el mundo estaba consternado por que les parecía increíble que yo estuviera en esa situación. Después de batallas con mi hermana y mi familia por otros asuntos me fui otra vez a Bogotá con la esperanza de radicarme allá y abandonar a mi familia, había conseguido un trabajo como asistente de diseño grafico, y logré una beca en la Universidad de la Sabana para cine, pero iba sin un peso, mis papas se negaban en ayudarme el primer mes, y la beca obtenida solo fue del 40% para pagar después un total de 4 millones el semestre con beca, me regresé con el rabo entre las piernas, para Bucaramanga. No me gustaba la UIS y menos que la carrera de Bellas Artes fuera a distancia, pero impulsado por el desespero y las ganas, me aguante esa condición e ingresé.

Actualmente me gusta leer sobre arte en especial aspectos históricos contemporáneos, honestamente no le dedico mucho tiempo, me veo motivado por el aburrimiento y por que no me gusta perder el tiempo, me gusta leer en sitios abiertos, odio los espacios cerrados, los últimos libros que he leído son Historia del Arte Universal de Ernst Gombrich, El espejo mágico, Fundamentos de Diseño básico de Wucius Wong,, mi principal fortaleza considero es que me intereso mucho por lo que hago y leo, mi principal dificultad ha sido la de toda mi vida: incapacidad de concentración. No espero solucionar este problema, es mas estoy empezando a acostumbrarme y no me parece tan malo, pero lo que si espero es tener mejoría en aspectos de redacción y comprensión.

viernes, 21 de septiembre de 2007

ACTIVIDAD EN CIPAS

PORTAFOLIO DE ESCRITOS



El tema fundamental de los escritos del portafolio es la lectura y la escritura, sus concepciones, problemas, métodos, estrategias, prácticas, críticas, y formas de evaluación de este acto creativo. La primera parte del portafolio debe contener un mínimo de 5 escritos, entre los cuales pueden estar: una entrevista, un resumen, un comentario, un informe, una carta, una columna de opinión, un artículo periodístico, un ensayo, una crónica, una reflexión, un cuadro comparativo, textos literarios (poesía o narración), una biografía, una noticia, una historieta, un guión, un instructivo, una conferencia, un discurso, una ponencia, entre otros. Recuerden todos los escritos deben ser sobre aspectos relacionados con los conceptos de lectura y escritura, apoyarse en las lecturas complementarias y contenidos del módulo. Para documentar el procedimiento de elaboración y las partes de los escritos es recomendable hacer algunas consultas sobre las tipologías textuales en Internet.



La segunda parte del portafolio debe contener una selección de cinco de los talleres y/o ejercicios propuestos en las unidades el módulo. Cada trabajo debe contener una valoración por parte de los compañeros del Cipas y las respectivas correcciones cuando sean necesarias. El portafolio debe tener: portada, tabla de contenido, introducción, desarrollo y conclusiones. Este trabajo no se publica en el blogger.

21 años de construccion por alberto espinosa

21 AÑOS DE CONSTRUCCIÓN

Color rosa

Nací en Valledupar el 9 de junio de 1986, sin ningún contratiempo, vivía con mis papas que me daban bastante amor, eran felices con mi nacimiento y yo era el centro de atención entre sus amigos y amigas.

Era feliz a la hora de bañarme y no quería salir de la bañera, además me gustaba mucho la música, brincaba cada vez que sonaba alguna canción. Me sorprendían los colores, los sabores y las texturas, todo me entretenía.

Yo era un niño con mucha energía y me la pasaba brincando, desafortunadamente por esa razón me caí del coche y me partí los dientes de adelante.
Me gustaba el mango, pero era más por subir con mi papa al árbol que por comérmelos.

A mi papa le salio un trabajo en barranca por eso decidimos mudarnos para allá…

Fraccionada mi familia

Llegamos a Barrancabermeja a vivir cerca de mi tío Genaro, en el barrio la floresta.
Todo iba bien, nos mudamos a una casa mas grande a una cuadra del teatro los fundadores y al lado de este, existía un local de “maquinitas” donde iba todas las tarde a jugar mortal kombat .
Paso un tiempo y mi papá llegaba tarde a casa casi no nos veíamos con el, luego empezó a ausentarse, solo venia a visitarnos por poco tiempo, yo veía a mi mamá llorar y me llenaba de rencor con mi papá, desafortunadamente me volví asociable, acabe mis amistades y me encerré en mi mismo, mis notas en el colegio decayeron y mi papá peleaba con mi mamá.
Un día “estallé” cuando mi papá nos quería llevar a conocer a nuestra hermanastra, que acababa de nacer, le dije que no quería ir con el a ningún lado, enfureció y me golpeo. Mi mamá quizo defenderme y la empujo, después de esto creo que reacciono y se dio cuenta de lo que había hecho y se fue.
Lo odiaba demasiado por dejarnos a mi mamá, a mi hermana y a mí.

Mi mamá me llevo al psicólogo a tratar de liberarme de ese rencor hacia mi papá ( cosa que todavía no he podido liberar), y desde allí surgió mi gusto por dibujar, mis primeros trazos fueron un intento de caballero del zodiaco y también hice a los simpsons en plastilina.

A mitad de cuarto de primaria mi mamá decidió que nos vendríamos a vivir a Bucaramanga y eso hicimos.


Nuevo comienzo

Llegamos a Bucaramanga, mi mamá, mi hermana y yo. Vivíamos en bacón del tejar. Entre a terminar cuarto grado en un colegio llamado psicopedagógico mi niño Jesús ubicado en el barrio Fátima, que era cercano a mi casa. Entre a hacer quinto grado al colegio militar general Santander, y ese mismo año me colocaron un aparato que antecedió los brackets, el aparato salía de mi boca y se amarraba a mi cabeza. Por esta razón en el colegio me llamaban “robocop”..
Pase a sexto y los “enanos” nos aliábamos en el descansó para jugar, y así los “altos” no nos molestaban, pero cuando nos encontrábamos solos aprovechaban para fastidiarnos, siempre fue una lucha entre ellos y nosotros “los enanos”.
Nos reuníamos a dibujar dragonball z, jugábamos “mete gol” y leíamos “escalofríos” (de R.Staine).

Un sábado mi mamá salió temprano y me dejo avena, yo la puse a calentar y me quede viendo televisión, paso mucho tiempo y el humo en toda la casa me recordó de la avena, al llegar a la cocina me di cuenta que la olla era inservible; por miedo a un regaño escondí la olla, y empecé a ahorrar para comprar otra y reemplazar la que había quemado. Una amiga de mi mamá que llego de visita desafortunadamente encontró lo que quedaba de la olla, entonces le dijo a mi mamá, cuando mi mamá me fue a decir, yo le entregue la plata antes que todo para que el regaño no fuera duro, pero mi mamá no se puso brava, no frunció el seño, no se cruzo de brazos si no que soltó en risas, porque le conté lo que había sucedido.

Llegó octavo grado y mi notas decaían termine el año debiendo muchos logros y debía recuperarlos en enero para poder pasar al siguiente curso, pero como se venia la instrucción militar la pensión,los uniformes y la matricula aumentaron sus precios, y resulto un problema monetario para mi mamá por lo que me mando a estudiar a san Alberto, donde vivía un tío que se ofreció a mantenerme en mi estadia.

Reto de adaptación

Llegue a San alberto e inicie noveno grado, este primer año fue muy duro para mi, me deprimía constantemente, el dinero que me daban solo lo usaba para llamar a mi mamá. Esta depresión despertó en mi el interés por la poesía, y esto era lo único que me distraía.
Al año siguiente suplante la poesía por los videojuegos (y grave error). Le empecé a gustar a una chica la que me invitaba a su casa todos los días a hacer tareas. Un día nos encontrábamos solos en su casa, ella se acostó en mis piernas y yo empecé a acariciarle el vientre, luego los senos y su entrepierna, ella quería besarme pero por miedo a besar mal no fui capaz de hacerlo y en ese instante llegó su papá que por poco y nos atrapa; ese día las cosas terminaron así. Estuve huyendo de ella un tiempo hasta que nos toco un trabajo en grupo con otras 2 compañeras y fuimos a su casa, habíamos empezado el trabajo, y yo en un arranque de aun no se que decidí acariciarle el entrepierna por debajo de la mesa (para mi era una hazaña), como ella era quien escribía el placer la retorcía y no podía, por ende las otras dos compañeras estaban sospechando, memiraban extrañamente y yo me hacia el que no sabia porque, hasta que una tomo la decisión de mirar debajo de la mesa pero yo rápidamente saque mi mano de su interior. Las cosas volvieron a quedar así. Termine el año y me vine a Bucaramanga paso diciembre y regrese a san alberto a culminar el tan esperado 11 grado. Donde despertó mi lado intelectual, en filosofía iba como un as, al igual que en química y en sociales, creo que era porque veía muy cerca el final de mi estadía en San alberto. Me dedique a leer y leer sobre filosofía, todo lo que el profesor me recomendaba, transcurrido el año me llego el ICFES, en el que ocupe el tercer lugar en el colegio, luego llego la excursión. Viaje con todo el salón a santa marta, donde los 4 días y 3 noches estuve en estado de embriagues. Una de esas estuvimos en una discoteca en la que me ocurrió algo jocoso, tanto alcohol en mi sangre no me dejaba ver bien y lo que creía una “monaza” no era mas que un travestí, y llegue a tocarle el trasero sin saber la realidad hasta que se volteo junto con su novio y querían golpearme, todos mis amigos intervinieron para ayudarme y los dueños de la discoteca pensaron que los que habían iniciado el pleito eran los homosexuales y los sacaron (cabe aclarar que no tengo nada en contra de ellos, pero soy muy hombre). Este acontecimiento fue causa de risa entre mis compañeros durante el resto de año que quedaba, al final fue exonerado del examen final de química y declarado el astro para la química en el salón.

Llego la graduación y yo mas feliz que nunca porque al fin me iba.

“Falta de pantalones”


REGREEESEEE A BUCARAMANGA (grito), inmediatamente mi mamá me hizo pasar papeles para entrar a estudiar química en la UIS y en realidad yo creía que iba a poder con ella pero desafortunadamente no fue así, el calculo y el álgebra se tornaron insoportables. Termine rindiéndome y dejando el semestre botado.
En el conjunto donde vivía empecé a tener amigos y a beber demasiado, cosa que me “descarrilo”, quise estudiar bellas artes desde ese momento, pero me deje presionar de mi familia y termine entrando a tecnología ambiental en la UTS.

En el conjunto conocí a una chica con la que experimente mi primer beso y mi primer “sexo” larelación con ella fue excelente hasta que termino por un chisme que resulto siendo mentira pero ya era tarde ya la había perdido.

Pasaron 2 años y me hastié de ambiental aunque dejo buenas nociones en mí de ecología y manejos de recursos naturales, que fueron las materias que me gustaron. Transcurrido un año sabático en el que lo único que hice fue un curso de caricaturas, que me dio mucha satisfacción y que me ha servido bastante.
al fin convencí a mi familia de entrar a estudiar bellas artes y ahora estoy aquí estudiando para ser un maestro.



Autodiagnóstico

En el ahondar en mi pasado, a medida que llegaban las imágenes de esos tiempos, los iba plasmando en el escrito con el placer de que no solo eran letras sino que también reflejo de mi construcción como la persona que soy ahora.

Cada letra, cada palabra, cada párrafo desatan en mi un sentimiento diferente: rencor, felicidad, dolor, amor, miedo, indecisión. Todo esto se ve reflejado al leer mi historia.

Al observar mi técnica del escrito, se pueden ver errores de puntuación, no creo que hayan errores de ortografía pero eso fue gracias a Word. No soy un escritor y tampoco leo mucho pero me siento orgulloso de mi escrito aunque haya falencias en él.

Plan de mejoramiento


Leer no es algo que hago a menudo, pero apartir de ahora que siento la importancia de la lectura en mi vida, voy a hacerlo porque es de mi interés construirme como una persona que es sensible a lo que lo rodea, y que quiere plantear soluciones apartir de su conocimiento para mejorarse y mejorar el ámbito en el que se desenvuelve, porque ya no me siento obligado a aprender, quiero aprender y voy a aprender.
Mi ambición y mi sed por el conocimiento han despertado, y estas dos cosas, creo, son herramientas importantes para lograr el conocimiento. Por ende mi interés por la lectura y la escritura se ha doblado, y haré todo lo que este a mi alcance para gestionar el conocimiento.

jueves, 20 de septiembre de 2007

APARTES DE MI VIDA

Hace tiempo en un pueblo de Santander, llamado Sucre, nació una niña a quien llamaron ROSA HELENA. Dicen mis padres que mi niñez transcurrió en una época muy tranquila, rodeada de personas de muy buenas costumbres. Mis padres trabajaron en el Magisterio y por consiguiente los trasladaban a diferentes lugares. Trato de recordar mi infancia y llegan algunos recuerdos muy vagos, creo que tendría 3 años o tal vez cuatro.

Recuerdo que mis padres eran profesores en una escuela muy grande de corrededores inmensos, al menos eso creo. Al ir creciendo las anécdotas se iban quedando en mi memoria, por eso hoy recuerdo con más claridad alguna de esas aventuras que pase junto a mi hermano Hugo, quien fue el cómplice de mis innumerables juegos y travesuras. Citando alguna me refiero a la siguiente: una tarde nos mandaron hacer el mercado a la tienda, nos llevamos una cajetilla de fósforos para jugar a los cigarrillos,de pronto arrojamos la cerilla sin ninguna precaución era una época de verano el calor era sofocante; en instantes las llamas se alzaron, tratamos de apagarlas saltando sobre ellas pero fue imposible, el terror nos invadió y la única salida fue correr corrimos muy rápidamente sin mirar atrás, solo escuchábamos el sonido de la hierba y las hojas al quemarse, llegamos a la tienda miramos atrás y la impresión fue aterradora. La loma estaba totalmente quemada, el humo cubria ,gran parte de la vereda y ni siquiera podíamos ver la escuela donde nos esperaban mis padres. Tal vez eran las 4 cuando regresamos y teníamos que cruzar cerca , nunca contamos nada pero no teníamos tranquilidad, ver a todos los vecinos cargar agua, además hicieron una brecha para evitar que el fuego llegara hasta la casa del dueño, el incendio duro tres días; nadie debía saber que los hijos de los profesores provocaron tal desastre.
El campo era algo muy hermoso a pesar de que la vida allí priva al ser humano de muchas cosas, pero estoy segura de que eso no influía; recorríamos caminos sin importar si llovía o hacia sol; recuerdo muy bien la tienda donde teníamos que ir a comprar los víveres, muchas veces, encontrábamos serpientes, eso si nos llenaba de terror, teníamos que cruzar una quebrada y cuando llovía se crecía, la pasábamos con mucho cuidado, el puente era un palo de gran tamaño pero este se ponía liso y teníamos que ser muy cuidadosos.
El tiempo pasaba y así mismo crecíamos; mi mamá me enseño a leer. Cursé el primero con ella y con mi papá estudie hasta el cuarto año. De pronto un día mis padres comenzaron a empacar todo tendríamos que irnos de la escuela. Los trasladaron al pueblo y la vida dio un pequeño giro tuve que adaptarme a otros circunstancias, conocer nuevas personas fue un cambio favorable; una etapa mas en mi vida época en la cual experimente cambios no solo a mi alrededor sino como persona tenia otra visión otros intereses. Los amigos jugaron un rol muy importante, quizás esta fue la mejor época de mi vida, estar en el colegio, vivir nuevas experiencias.
Esos paseos de estudiante; recuerdo una salida que tuvimos, fue a una cueva; lo mas bonito del paseo era estar al lado de la persona que me gustaba. Las tardes en el pueblo transcurrían lentamente a veces nos reuníamos y salíamos a jugar básquet; era una vida muy tranquila, las ilusiones alimentaban el diario vivir. En el ultimo año de colegio viaje junto a mis compañeros de curso a la costa (Santa Marta, Barranquilla y Cartagena) esta si fue una experiencia inolvidable no solo por conocer el mar sino por marcar una nueva etapa en mi vida.

A finales de ese año me vine a vivir a Piedecuesta. Viví sola por un tiempo en la casa de mis padres. Trabaj
aba y estudiaba. Conocí una persona muy especial, alguien que lleno mi vida de ilusiones y fantasías. Había transcurrido un año cuando un día decidimos tomar un camino quizás el más largo de mi vida. Era un domingo cuando emprendimos ese viaje. Nos casamos una tarde en la notaria primera, después fue la ceremonia en la iglesia a la cual pertenecíamos. Pasaron unos meses y decidimos irnos a Bogota. Fue una época muy bonita. Alexander es pintor y entonces visitábamos museos, galerías. Vivíamos en función del arte. Después de cuatro años decidimos tener un hijo y el día 15 de septiembre llegó Camilo, trayendo con él, nuevas expectativas e ilusiones que llenaron mi vida, esto sucedió en la clínica El Bosque, casualmente ese mismo día vino al mundo el primer hijo de Robinsón Díaz y es por eso que aun conservó esta foto. Paso un año más y decidimos regresarnos a Piedecuesta. Luego viajamos a Medellín. Allí nos quedamos durante un año y nuevamente regresamos a Piedecuesta. Es entonces cuando llega mi segundo hijo a quien llamamos Manuel.
Han transcurrido 6 años desde entonces y quizás nunca acabaría de mencionar cada suceso. Son nuevas aventuras que mis hijos han traído a mi vida. Actualmente estoy separada de Alexander llevo una vida normal y en este momento inicio una nueva etapa, la cual debo culminar no solo por mi, sino por mis hijos, quienes son el motivo mas importante para seguir el camino que un día decidí tomar. Se que Dios esta conmigo y me dará las fuerzas necesarias para continuar y espero llegar al final en compañía de todos ustedes y que sea un motivo para celebrar.
HELENA MARIN DIAZ

martes, 18 de septiembre de 2007

IVAN DURAN "MI HISTORIA"

IVAN DARIO DURAN VARGAS
Bellas artes
Primer semestre


“MI HISTORIA”




PRIMER MOMENTO: Cuando aprendí a leer el mundo, antes de leer la palabra.

Nacido el 29 de Abril de 1983 en San Gil (S/der), de padres Sangileños igualmente, mi madre Ana Vargas, una mujer de campo, trabajo, oficio, como en aquellos tiempos; Mi padre, José Duran, un hombre trabajador, creativo, tanto así que trabajaba la electrónica sin especialización alguna, su gran debilidad el trago y la vida desordenada, motivo por el cual la relación entro en crisis sentenciando su final en el año de 1988.
Hasta este mismo año (1988), los recuerdos son nublosos, mi casa algo pequeña, se distribuida en una sala – comedor, dos habitaciones, un baño, la cocina y el solar, ubicada sobre una amplia avenida sin pavimentar y mucho trancito vehicular, lo cual valía una prohibición de mis padres para no salir aventurar con mis amigos ese mundo exterior que encontraba al otro lado de la puerta principal de mi pequeña morada, prohibición que se cumplía la mitad de las veces, por que aun recuerdo jugar con carritos sobre esas curiosas estructuras de barro que dejaban las grandes llantas de los autobuses de la época.

Mi vida transcurría de nuestra casa y la casa donde trabajaba mamá; atendiendo un micro mercado, mientras yo pasaba el día con unos cuantos muñecos y un gato negro que sus dueños consentían como uno más de ellos.
Mamá aprovechaba los domingos como buena cristiana para la visitar la iglesia, para lo que yo hacía buena cara solo por el paseo y un rico helado que disfrutábamos luego de un largo e incomprensible discurso matutino.

A finales del año 1988 tras el fracaso matrimonial de mis padres, mamá decide empezar con una nueva etapa de su vida, se traslada a la Ciudad de Bucaramanga (S/der), se establece y unos días más tarde regresa por mi, algo por lo que papá no estaba muy de acuerdo.
Mamá invento unas cortas vacaciones a la ciudad donde se radicaba, con una autorización no muy convencida de papá, igual creo pensar, que retenerme solo era pretexto por la separación con mamá, y la confirmación de ello es no haber vuelto a la ciudad de San Gil.

Recuerdo de mí llegada a la capital, un centro abastecido de gente y comercio, mi mirada se perdía entre la masa humana y vehicular.
Mamá se había ubicado en el barrio caldas de Floridablanca, las cosas no fueron para nada fácil, construir una vida nueva tendría sus complicaciones, mamá entro a trabajar en el servicio domestico y yo en mi nuevo techo “La pensión”.

LA PENSION

Su entrada una gigantesca puerta de madera color café, otra contrapuerta en barrotes de madera verticales, que tenían como objetivo retener un gran perro, del tamaño de un cerdo, que sin ladrar ya espantaba, luego seguía un largo pasillo con habitaciones de lado y lado, la habitación nuestra, atrás cerca del patio de ropas y nuestra vecina más cercana la señora Rosa, quien cuidaba de este humilde narrador mientras mi madre llegaba de trabajar.

De menos a más se construyo un ambiente familiar con doña Rosa y los suyos, ella una señora seria y entregada a sus extrañas creencias religiosas, don Ramón, su señor esposo que dejaba ver su gran sabiduría en su cabellera blanca, y Rosita la hija de esté feliz ejemplo matrimonial; con Rosita creció una bonita e inocente amistad, y se convirtió en la compañera ideal para divertir esos solos y largos días sin mamá.


SEGUNDO MOMENTO
AL INICIAR LA LECTURA DE LA PALABRA, CUANDO INGRESE A LA ESCUELA Y EL BACHILLERATO


LA ESCUELA

Mis estudios de primaria los realice en la Concentración Fe y alegría del barrio zapamanga, un barrio vecino cerca del caldas.
Todos los días caminaba como unos 500 metros en subida hasta llegar a la escuela, lo primero que encontrábamos era su amplia entrada, estaba también cercada con paredes de ladrillo a medio pintar con cal blanca, unos metros más adelante una cancha para las clases deportivas y para la formación diaria antes de cada jornada estudiantil, en un costado otra pequeña entrada a la zona de aulas de clases, distribuidas en un largo y escalafonado patio, qué si dejáramos a nuestra imaginación, parecían cascadas de concreto que descendían a un metro de altura una de la otra.
Encontramos la rectoría, la caseta de venta de refrescos y comida y diez aulas de clase, dos por cada grado, dos para primero, dos para segundo y así uno al frente del otro.

Era una escuela regida por monjitas, y como en todo cuento siempre había la gruñona (La rectora, de procedencia española) y la buena gente (La profesora de español).

La escuela es una experiencia muy bonita, ahora recordando, el aprender con el corito, ¡la mamá de memo, memo ama a su mamá!, el conocer nuestro país con pasadas al mapa a decir departamentos y capitales, las complicadas carteleras, las cadenas alimenticias de las ciencias naturales, en fin un reto en ese entonces, una historia divertida hoy.


EL COLEGIO

Para esa época dejaba atrás las aventurillas de escuela para explorar ese nuevo reto, el colegio, a finales del año de 1993 estábamos en una temporada muy crucial, entrega de boletines de quinto , lo que de tener éxito valía avanzar a mis estudios secundarios, aparte de eso, los exámenes de admisión a colegios oficiales y un empleo que mamá gestionaba para mi, según ella “para no darle tiempo a los malos hábitos juveniles”; y entonces el pelao de los mandados mi primer cargo laboral, en un taller automotriz.

Terminaba bien el año escolar y empezaba la búsqueda de colegio, mamá siempre resaltaba “Que bueno seria tener el privilegio de escoger colegio” no muy lejana estaba esa alegría para mamá, aprobé en tres colegios oficiales, uno de ellos el Instituto de enseñanza media diversificada (INEM), donde también mama quería que estudiara y así fue.

En el año de 1994 empecé mi primero bachillerato, el colegio una gran institución a nivel académico y físico, centenares de estudiantes, cantidades de salones de clase, seis cafeterías, diez canchas deportivas, un coliseo, un auditorio, calles amplias nos sentíamos en una pequeña ciudad, los primeros días, era más la preocupación por no extraviarnos, que por estudiar , y con ello también los cambios escolares, no eran dos recreos, si no cinco descansos entre clase y clase, teníamos un aula y un profesor por materia de clase, mas horas escolares, mas responsabilidad académica, un cambio total.
Hasta tercero bachillerato se rotaban ramas académicas cada cuatro meses y estas eran, promoción social, industrial y agropecuaria, ya en noveno se elegía una, siendo esta última la de mi elección.
Teníamos cada ocho días un encuentro con la naturaleza, nos enseñaron a cuidar, trabajar y aprovechar los animales y la tierra.

En secundaria no fui exento de aquello que nos hace un poco la vida complicada, los previos, los exámenes finales, exposiciones orales, trabajos individuales y grupales, esos largos ejercicios matemáticos, suspendidas de clase, llamadas de acudiente, firmas en el observador, entrega de notas a los padres de familia y cientos de problemas mas.
También hubo momentos gozosos con los compañeros de clase, guerras de bolas de papel, excursiones, días de granja, reuniones cumpleañeras, las clases deportivas, de dibujo, manualidades, todas ellas con buenas calificaciones.

Luego de seis años de momentos complicados y buenos, en el año de 1999 se cumple con el objetivo, graduarme como bachiller inemita un nuevo triunfo mió y de mamá, el 04 de diciembre de este mismo año llega el momento tan esperado por mis compañeros y yo, la gala y el diploma de grado, el saludo con el rector después de seis largos años sin cruzar palabras con el, las fotos y lagrimas de alegría, las felicitaciones familiares, en fin, terminaba una etapa más de mi vida.

EL ¿QUE VOY HACER?

En el año 2000, después de unas cortas vacaciones dicembrinas empieza la etapa del ¿Qué voy hacer? Estudiar, trabajar, siendo esta última, la primera opción por cuestiones económicas, seguí trabajando en el taller automotriz pero ya no solo en vacaciones, si no en la planta principal, donde me he venido desempeñando como auxiliar en la parte administrativa.


TERCER MOMENTO: ahora, como soy yo como lectoescritor.

En los tres últimos años mi vida gira alrededor de grandes cambios, seguimos construyendo un mejor futuro con mamá, conocí a mi novia Yuly, tenemos un hermoso hijo de dos años llamado Santiago, por ahora ellos están con mis suegros mientras planteamos como convivir, el trabajo ocupa la mayor parte de mi tiempo, trato de aprovechar los espacios libres con mi familia y las cosas personales, ahora el día de descanso semanal lo utilizo para mi carrera universitaria en bellas artes, me encanta el dibujo, las manualidades, el cine, el fútbol, me relaciono mas con la lectura que la escritura, leo periódicos y revistas deportivas y sociales, libros tengo algunos, me gustan mucho los relacionados con la superación personal, mi defecto es que nunca los termino, recuerdo haber leído uno completo se llama ¿QUIE SE HA LLEVADO MI QUESO? También están DIANETICA, PORQUE TRIUNFAN LOS TRIUNFADORES, LAS SIETE LLAVES DE LA SUPER EFICIENCIA, TRES LIBROS DE IGOR, pero todos ellos a medio leer, la verdad mi trabajo ocupa mucho tiempo, cuando me motivo a leer, es por hacer pequeños cambios en mi cotidianidad, como ser mas eficiente en la familia, trabajo, estudio, como sacar cosas buenas de las malas situaciones, y buscar una correcta orientación personal, familiar social.



EVALUACION Y VALORACION DE LA HISTORIA LECTOESCRITORA


Para construcción de mi historia lecto – escritora, trate primero que todo seguir los pasos según como lo propone Paulo Freire, haciendo un intento por usar bien las letras mayúsculas y la ortografía, aunque fallo en dar un buen uso a los signos de puntuación, y nunca uso la tilde.
Presento un orden lógico en el escrito, repito tal ves muchas palabras sin darme cuenta, también falle por hacer una redacción personal en partes de la historia, establecí subtítulos para marcar momentos.
Si nos damos cuenta, no hubo métodos ni ejemplos de enseñanza lecto escritora por parte familiar, creo que es algo que nuestros padres dejan en manos de instituciones educativas, sin crearse ese ambiente lectoescritor que nos favorece para nuestros días, tampoco las escuelas y colegios de la época hacían mayor esfuerzo por extender, esas habilidades ligadas a la comunicación, como son la lectura y la escritura.
Quisiera establecer un método de enseñanza lecto –escritora y mejorar habilidades para la gestión del conocimiento, como por ejemplo una buena auto percepción de contenidos en mis lecturas.



PLAN DE MEJORAMIENTO

Como nuestra carrera lo exige, me esforzare por percibir y comprender hasta las características mas pequeñas de nuestra vida cotidiana, tratar de dar sentido a todo lo que me rodea. Leo con poca frecuencia por causa de mi trabajo, abarca la mayor parte de mi tiempo, en mis espacios laborales leo periódicos, revistas preferiblemente deportivas, ocupan mas espacio en mi interés lector, tengo libros a medio leer por no adquirir esa disciplina que se nenecita, la cual quiero adquirir, me gustan mucho las lecturas relacionadas a mejorar mi vida personal, familiar y laboral; como ya decía bellas artes es una carrera que necesita que el estudiante tenga mucho contacto con la naturaleza, lo material y la sociedad, por lo tanto dedicare a trabajar fuerte en los talleres de lenguaje con ayuda de nuestro profesor y los cipas, para lograr construirme como una persona mas critica, y procurare terminar en este resto de año 2007, por lo menos 2 libros que he aplazado por falta de dedicación y me dedicare a complementar mis estudios accediendo, seleccionando y aplicando a mi proyecto de vida toda información posible.


domingo, 26 de agosto de 2007

PAUTA PARA EVALUAR Y VALORAR LA HISTORIA LECTOESCRITORA



Los escritos serán leídos por el Tutor y los estudiantes con el fin de identificar las características textuales y la información contextual ofrecida por los estudiantes. Al finalizar se registra la información encontrada en tres grandes categorías, así:

· Dificultades o fortalezas relacionadas con la aplicación de las normas de la Lengua Castellana
· Dificultades o fortalezas relacionadas con el desarrollo del contenido del escrito
· Características favorables o desfavorables del contexto en el cual aprendió a leer y escribir (hogar, escuela, comunidad)

Categoría: Dificultades relacionadas con la aplicación de las normas de la Lengua Castellana

Favor completar la descripción con los detalles del escrito, por ejemplo escribir al frente de cada subcategoría una muestra del mal o buen uso de la norma objeto de análisis, si es necesario crear nuevas categorías

Subcategorías

1. Mal uso de las letras mayúsculas

2. Errores de ortografía

3. Ausencia del uso de la tilde

4. Mal uso de los signos de puntuación

5. Empleo del apóstrofe



Categoría: Dificultades relacionadas con el desarrollo del contenido del escrito


Escribir al frente de cada subcategoría algún fragmento de la historia que documente los aspectos que integran esta subcategoría y realizar un comentario al respecto.

Subcategorías

6. Orden ilógico de oraciones

7. Mal uso de conectores o ausencia de ellos

8. Repetición innecesaria de palabras

9. Vocabulario coloquial

10. Ausencia de segmentación de oraciones

11. Ausencia de segmentación de párrafos

12. Falta de unidad temática en los párrafos

13. Falta de concordancia temporal entre oraciones

14. Falta de concordancia de número en algunas oraciones

15. Redacción personal

16. Ausencia de títulos o subtítulos

17. Falta de coherencia entre los subtemas que desarrolla

18. ausencia de un orden lógico en el escrito


Categoría: Dificultades relacionadas con las características del contexto en el cual aprendió a leer y escribir
Escribir una síntesis del contenido que pueda fundamentar cada aspecto de la subcategoría.

Subcategorías


15. Ambiente familiar favorable

16. Ambiente familiar adverso

17. Ambiente escolar desfavorable

18. Ambiente escolar estimulante

19. Métodos de enseñanza de la lectoescritura

20. Auto percepción lectoecritora positiva

21. Auto percepción lectoescritora negativa



Conjeturas a modo de conclusiones

Los estudiantes redactan algunas ideas que se derivan del anterior análisis para caracterizar su situación lectoescritora actual, sus antecedentes y su compromiso futuro como estudiantes y lectoescritores. El resultado es de esta Autoevaluación se publica en el blogger o se entrega en papel al Tutor

Construcción de la Historia Lecto-escritora


Primero los estudiantes leen un artículo de Paulo Freire sobre la “Importancia de la leer y el acto de liberación”, luego cada estudiante redacta su propia historia lectoescritora. Para orientar la construcción de este escrito se suministra a los estudiantes una orientación a manera de estructura del escrito. Después de revisar y socializar las historias se publican en ESTE blog construido para tal fin.
LA IMPORTANCIA DEL ACTO DE LEER

Tomado de FREIRE, Paulo. La importancia de leer y el acto de Liberación
Siglo XXI editores

Rara ha sido la vez, a lo largo de tantos años de práctica pedagógica, y por lo tanto política, en que me he permitido la tarea de abrir, de inaugurar o de clausurar encuentros o congresos. Acepté hacerlo ahora, pero de la manera menos formal posible. Acepté venir aquí para hablar un poco de la importancia del acto de leer. Me parece indispensable, al tratar de hablar de esa importancia, decir algo del momento mismo en que me preparaba para estar aquí hoy; decir algo del proceso en que me inserté mientras iba escribiendo este texto que ahora leo, proceso que implicaba una comprensión crítica del acto de leer, que no se agota en la decodificación pura de la palabra escrita o del lenguaje escrito, sino que anticipa y prolonga en la inteligencia del mundo. La lectura del mundo precede a la lectura de la palabra, de ahí que la posterior lectura de ésta no pueda prescindir de la continuidad de la lectura de aquél. Lenguaje y realidad se vinculan dinámicamente. La comprensión del texto a ser alcanzada por su lectura crítica implica la percepción de relaciones entre el texto y el contexto. Al intentar escribir sobre la importancia del acto de leer, me sentí llevado y hasta con gusto a “releer” momentos de mi práctica, guardados en la memoria, desde las experiencias más remotas de mi infancia, de mi adolescencia, de mi juventud, en que la comprensión crítica de la importancia del acto de leer se vino constituyendo en mí.

Al ir escribiendo este texto, iba yo “tomando distancia” de los diferentes momentos en que el acto de leer se fue dando en mi experiencia existencial. Primero, la “lectura” del mundo, del pequeño mundo en que me movía; después, la lectura de la palabra que no siempre, a lo largo de mi escolarización, fue la lectura de la “palabra - mundo”. La vuelta a la infancia distante, buscando la comprensión de mi acto de “leer” el mundo particular en que me movía y hasta donde no me está traicionando la memoria me es absolutamente significativa. En este esfuerzo al que me voy entregando, recreo, revivo, en el texto que escribo, la experiencia vivida en el momento en que aún no leía la palabra. Me veo entonces en la casa mediana en que nací en Recife, rodeada de árboles, algunos de ellos como si fueran gente, tal era la intimidad entre nosotros; a su sombra jugaba y en sus ramas más dóciles a mi altura me experimentaba en riesgos menores que me preparaban para riesgos y aventuras mayores. La vieja casa, sus cuartos, su corredor, su sótano, su terraza – el lugar de las flores de mi madre, la amplia quinta donde se hallaba, todo eso fue mi primer mundo. En él gateé, balbuceé, me erguí, caminé, hablé. En verdad, aquel mundo especial se me daba como el mundo de mi actividad perceptiva, y por eso mismo como el mundo de mis primeras lecturas.

Los “textos”, las “palabras”, las “letras” de aquel contexto en cuya percepción me probaba, y cuanto más lo hacia, más aumentaba la capacidad de percibir – encarnaban una serie de cosas, de objetos de señales, cuya comprensión yo iba aprendiendo en mi trato con ellos, en mis relaciones con mis hermanos mayores y mis padres. Los “textos”, las “palabras, las “letras” de aquel contexto se encarnaban en los cantos de los pájaros (...) en la danza de las copas de los árboles(...); las aguas de la lluvia jugando a la geografía, inventando lagos, islas, ríos, arroyos. Los “textos”, las “palabras”, las “letras” de aquel contexto se encarnaban también en el silbo del viento, en las nubes del cielo, en sus colores, en sus movimientos (...).

De aquel contexto formaban parte además los animales (...) el universo del lenguaje de los mayores, expresando sus creencias, sus gustos, sus recelos, sus valores. Todo eso ligado a contextos más amplios que el de mi mundo inmediato y cuya existencia yo no podía ni siquiera sospechar. En el esfuerzo por retomar la infancia distante, a que ya he hecho referencia, buscando la comprensión de mi acto de leer el mundo particular en que me movía, permítanme repetirlo re – creo, re – vivo, en el texto que escribo, la experiencia vivida en el que todavía no leía la palabra. Y algo que me parece importante, en el contexto general de que vengo hablando, emerge ahora insinuando su presencia en el cuerpo general de estas reflexiones. Me refiero a mi miedo de las almas en pena cuya presencia entre nosotros era permanente objeto de las conversaciones de los mayores, en el tiempo de mi infancia. (...)
Me acuerdo de las noches en que, envuelto en mi propio miedo, esperaba que el tiempo pasara, que la noche se fuera(...) Pero en la medida en que fui penetrando en la intimidad de mi mundo, en que lo percibía mejor y lo “entendía” en la lectura que de él iba haciendo, mis temores iban disminuyendo. Pero es importante decirlo, la “lectura” de mi mundo, que siempre fue fundamental para mí, no hizo de mí sino un niño anticipado en hombre, un racionalista de pantalón corto. La curiosidad del niño no se iba a distorsionar por el simple hecho de ser ejercida, en lo cual fui más ayudado que estorbado por mis padres. Y fue con ellos, precisamente, en cierto momento de esa rica experiencia de comprensión de mi mundo inmediato, sin que esa comprensión significara animadversión por lo que tenía de encantadoramente misterioso, que comencé a ser introducido en la lectura de la palabra. El desciframiento de la palabra fluía naturalmente de la “lectura” del mundo particular. No era nada que se estuviera dando superpuesto a él. Fui alfabetizado en el suelo de la quinta de mi casa, a la sombra de los mangos, con palabras de mi mundo y no del mundo mayor de mis padres. El suelo fue mi pizarrón y las ramitas mi gis.

Es por eso por lo que, al llegar a la escuelita particular de Eunice Vasconcelos (...), ya estaba alfabetizado. Eunice continuó y profundizó el trabajo de mis padres. Con ella la lectura de la palabra, de la frase, de la oración, jamás significó una ruptura con la “lectura” del mundo. Con ella, la lectura de la palabra fue la lectura de la “palabra-mundo”. (...) Continuando con este esfuerzo de “releer” momentos fundamentales de experiencias de mi infancia, de mi adolescencia, de mi juventud, en que la comprensión crítica de la importancia del acto de leer se fue constituyendo en mí a través de su práctica, retomo el tiempo en que, como alumno del llamado curso secundario, me ejercité en la comprensión crítica de los textos que leía en clase, con la colaboración, que hasta hoy recuerdo, de mi entonces profesor de lengua portuguesa. (...) No eran aquellos momentos “lecciones de lectura” en el sentido tradicional de esa expresión. Eran momentos en que los textos se ofrecían a nuestra búsqueda inquieta (...). Todo eso, se proponía a la curiosidad de los alumnos, de manera dinámica y viva, en el cuerpo mismo de textos (...). Los alumnos no tenían que memorizar mecánicamente la descripción del objeto, sino aprender su significación profunda.

(...) La lectura de un texto, tomado como pura descripción de un objeto y hecha en el sentido de memorizarla, ni es real lectura ni resulta de ella, por lo tanto, el conocimiento del objeto de que habla el texto. (...) La insistencia en la cantidad de lecturas sin el adentramiento debido en los textos a ser comprendidos, y no mecánicamente memorizados, revela una visión mágica de la palabra escrita. Visión que es urgente superar. (...) Me parece interesante reafirmar que siempre vi la alfabetización de adultos como un acto político y un acto de conocimiento, y por eso mismo como un acto creador. Para mí sería imposible comprometerme en un trabajo de memorización mecánica de ba-be-bi-bo-bu, de la-le-li-lo-lu. De ahí que tampoco podría reducir la alfabetización a la pura enseñanza de la palabra, de las sílabas o de las letras. Enseñanza en cuyo proceso el alfabetizador iría “llenando” con sus palabras las cabezas supuestamente “vacías” de los alfabetizandos. Por el contrario en cuanto acto de conocimiento y acto creador, el proceso de alfabetización tiene, en el alfabetizando, su sujeto.

(...) La lectura del mundo precede siempre a la lectura de la palabra y la lectura de ésta implica la continuidad de la lectura de aquél. En la propuesta a que hacía referencia hace poco, este movimiento del mundo a la palabra y de la palabra al mundo está siempre presente. Movimiento en que la palabra dicha fluye del mundo mismo a través de la lectura que de él hacemos. De alguna manera, sin embargo, podemos ir más lejos y decir que la lectura de la palabra no es sólo precedida por la lectura del mundo sino por ciertas formas de “escribirlo” o de “re-escribirlo”, es decir de transformarlo a través de nuestra práctica consciente. (...) Concluyendo estas reflexiones en torno a la importancia del acto de leer, que implican siempre percepción crítica, interpretación y “re-escritura” de lo leído, quisiera decir que, después de vacilar un poco, resolví adoptar el procedimiento que he utilizado en el tratamiento del tema, en consonancia con mi forma de ser y con lo que puedo hacer...



GUIA PARA REDACTAR LA HISTORIA LECTOESCRITORA

Organice su historia en tres momentos como lo propone Paulo Freire:

Primer momento:

Cuando aprendió a leer el mundo, antes de leer la palabra.

Segundo momento:

Al iniciar la lectura de la palabra, cuando ingresó a la escuela y el bachillerato

Tercer momento

Ahora, cómo es usted como lectoescritor. Es la autoevaluación del comportamiento lector- esritor hoy. Cada momento es como un capítulo de su historia, según los aspectos tratados proponga subtítulos para organizar con mayor claridad su trabajo. Redacte párrafos de entre 5 y 8 renglones. Tenga en cuenta aspectos como los siguientes en cada etapa:

Lectura del mundo

Describa sus padres
Describa la casa dónde nació
Describa sus primeros contactos con la naturaleza
Describa a la persona que lo acompañó de pequeño
¿Qué le hablaban?
¿Con quién jugaba?
¿Qué lugares visitó?
¿Quién le contaba historias?
¿Cómo era sus relaciones con otros niños o adultos?
Cuente alguna anécdota o suceso especial que haya marcado su vida
¿Recibió ejemplo lector y escritor de algún adulto?

Lectura de la palabra

Recuerda su primer día de clases
Describa la escuela donde estudio
¿Cómo eran sus maestras de primaria y secundaria?Sus voces, sus rostros, sus gestos, sus palabras, sus métodos, las tareas, las cartillas que utilizaban, la forma como evaluaban, los estímulos, los castigos, el uso que hacían de la biblioteca, la forma como le enseñaron a leer y escribir, sus progresos de un curso a otro hasta la secundaria
¿Qué recuerda con gozo y qué recuerda con dolor?
¿Cómo ha sido su relación con la lectura en la universidad (para quienes ya habían estudiado algún programa)


Autoevaluación del comportamiento lector escritor hoy

Para revisar su comportamiento lector escritor hoy :
¿Qué lee?
¿Cuánto tiempo le dedica?
¿Cuáles son sus motivos para leer y escribir?
¿Qué libros tiene?
¿Cada cuánto lee?
¿Dónde prefiere leer?
¿Visita bibliotecas?
¿Cada cuánto?
¿Compra o regala libros?
¿Qué escribe y para quién?
¿Cada cuánto escribe?
¿Cuáles son sus fortalezas y debilidades en lectura y escritura?
¿Qué formación tiene o desea para ser una persona autónoma en lectura y escritura?
¿Qué conceptos tiene de leer y escribir?

Estas preguntas son una guía para orientar el desarrollo de los párrafos de su escrito, no se trata de responderlas como un cuestionario.

¿CÓMO INTERPRETAR EL AUTODIAGNOSTICO LECTOESCRITOR DEL MODULO?



El diagnóstico inicial propuesto en el MODULO pretende indagar sobre los hábitos, destrezas, comportamientos, habilidades, y entorno lecto-escritor del estudiante que ingresa a un programa a distancia e incluso sobre los conceptos que él tiene sobre la lectura y su papel como lecto – escritor.
Categorías para el análisis de los resultados del autodiagnóstico del MóduloLas preguntas propuestas esconden aspectos, a los que llamamos categorías, las cuales sirven para identificar en qué factores hay fortaleza o debilidad y como consecuencia orientar a los estudiantes para que propongan un PLAN DE MEJORAMIENTO lectoescritor.

1- Sentido y propósito de lectura.
A esta categoría corresponden los numerales 1,2,5,13,40,42. Si hay ausencia de sentido y propósito la comprensión lectora no se logra.

ALTERNATIVAS: El estudiante debe encontrar una relación significativa a los contenidos de las lecturas que realiza. Debe hacer una lista de preguntas antes de iniciar la lectura, preguntas que surgen de sus intereses personales, académicos, ideológicos, políticos, sociales, culturales laborales o profesionales según el caso. No se debería leer si no se tienen preguntas por resolver o un problema que le preocupe, pues no tendrá sentido la lectura.

2- Revisión preliminar y presaberes.
Categoría con la cual están relacionados los numerales 3 y 4. Si no obtuvo puntaje positivo en estos numerales no está actuando como un lector maduro. Un lector con experiencia hace una revisión preliminar del escrito antes de detenerse a leerlo en profundidad, así decide si es o no es pertinente para sus propósitos. También se autoexamina para identificar qué sabe sobre el tema de la lectura, qué experiencias, motivaciones y actitudes tiene.

ALTERNATIVAS: Leer los datos de la portada de los libros, verificar quién es el autor, cuándo se publicó qué otros libros ha producido, qué dice la introducción o el prólogo, cómo está organizada la tabla de contenido, cuales temas tienen más tratamiento, cuáles están sólo enunciados. Los presaberes son las ideas que tenemos sobre los temas, así sea de manera hipotética, un poco especulativamente, ser conscientes de ello, revisar las actitudes y experiencias relacionadas con el contenido.

3- Motivación.
Los numerales que indagan sobre este importante aspecto son: 12, 15, 17, 18, 19, 20, 43. Si las respuestas indican debilidad en la motivación usted debe ser consciente que hay dos tipos de motivaciones, una externa a la persona y otra interna. También se llaman exógena y endógena respectivamente. Por lo general las personas actúan por motivos externos, esto no es lo deseable, pues se cae en la manipulación y cosificación de la persona. El ideal es que la motivación sea intrínseca, es decir interna, que un sueño, una utopía, o una meta sublime por alcanzar sea lo que nos motive a ser cada vez mejores seres humanos como ciudadanos, como estudiantes, en fin en todos los roles que desempeñamos, para ser coherentes.

ALTERNATIVAS: El primer paso es identificar cuál es la tendencia de cada uno, qué tipo de motivación es la que predomina. Luego descubrir en uno mismo los motivos que tenemos para alcanzar nuestras metas, qué queremos ser, cuál es el futuro que queremos para nuestros hijos, para nuestra familia, para la comunidad donde vivimos, para nuestro país, quizás esto nos ayude a focalizar un PROYECTO DE VIDA centrado en todas las dimensiones del ser humano, crecer como personas, ser más auténticos, más pacíficos, más intelectuales, más creativos, más asertivos, vivir con más comodidades, ser más ecológicos, tener un país más autónomo, sin tantos problemas. En fin, pensar y actuar para tener un bienestar personal, familiar y social, ayudado por el aprendizaje de las ciencias y la convivencia pacífica. Por este camino encontraremos una motivación interior muy potente que convierta la lectura y la escritura en una pasión permanente y no en una tarea y una actividad pesada, aburrida.

4- Planeación del proceso lecto-escritor.
Con este aspecto están relacionados los numerales 4, 6, 9, 10, 11, 34. Si encontró debilidades en estos numerales usted no considera el acto lector y escritor como un proceso, evade planearlos o desconoce cómo se planean.

ALTERNATIVAS: proceso es un concepto que indica la existencia de etapas, fases o momentos, de revisión constante. La comprensión lectora y la composición de un escrito son actos complejos porque intervienen muchas variables, muchos factores. En general se requiere poner en acción competencias de tipo cognitivo, es decir saber con claridad sobre el tema que leemos o escribimos, estar dispuestos a aprender más sobre el tema, también tener conocimientos básicos sobre las normas del idioma y particularmente sobre la estructura de los textos que estamos leyendo o escribiendo. En el caso de la lectura se sabe que sólo se comprende después de varias lecturas y de dialogar sobre lo leído con otras personas, con otros autores, se lee escribiendo. En cuanto a la escritura, es un acto que depende de la lectura, si se tiene suficiente conocimiento y documentación sobre un tema podemos hacer un plan para desarrollar un escrito, revisarlo, corregirlo, compartirlo con otros y finalmente publicarlo.

5- Profundización de la comprensión.
A este aspecto corresponden los numerales: 7, 25, 26, 30, 32, 36, 37, 38. Una valoración insuficiente en estos numerales es muy peligrosa porque indica que el lector es muy superficial, no domina la profundidad de un tema. Comprende literalmente, no puede hacer inferencias, argumentar, y contra-argumentar los puntos de vista expuestos por el autor, la capacidad crítica es nula.

ALTERNATIVAS: La ampliación de la comprensión implica ir más allá de leer por una única vez un escrito y creer que ya se comprendió. La comprensión profunda requiere leer otras versiones, otros autores, otras fuentes, confrontar con la realidad, con otras épocas, con las diversas culturas. A esto se llama intertextualidad, es el diálogo de un escrito con otro escrito, con otro autor, con otro lector, con otra ideología. Así se impide el dogmatismo pues la confrontación de ideas posibilita el surgimiento de la actitud crítica, ya que se consideran diversos puntos de vista y el lector ya documentado toma una opción y tiene ideas para sustentar su decisión.

En términos más concretos es ir más allá del MODULO dado por el INSED, visitar las bibliotecas, las páginas web especializadas, hablar con especialistas, ver cine y videos documentales, leer revistas especializadas, asistir a conferencias, estar preocupado por el avance de los procesos sociales, políticos, económicos, académicos, etc.

6- Sistematización de la información.
Aspecto del que dan cuenta los numerales: 23, 27, 33, 47, 48, 49. Un puntaje bajo en estos aspectos indica dificultades para sintetizar y organizar la información contenida en un texto. En estos casos hay ausencia de criterios para diferenciar lo importante de lo secundario, los conceptos de las opiniones, lo general de lo particular, todo parece sencillo o todo parece complejo.

ALTERNATIVAS: Aprender a clasificar las ideas, los temas, los conceptos. Tomar apuntes en forma organizada, utilizar nomencladores, numerales, viñetas para señalizar la información, utilizar títulos y subtítulos. La información, los temas, los conceptos se pueden organizar siguiendo diversos criterios: orden lógico, orden cronológico, orden espacial, orden de importancia, orden causa efecto, orden de lo general a lo particular, o viceversa, por aspectos o dimensiones (social, político, económico, cultural, psicológico, jurídico, religiosos, local, regional, nacional, internacional, lo humano, lo espiritual, lo material, lo animal, lo racional, lo irracional, lo real, lo ficticio). Cuando hay mucha información se identifica cada segmento con un tema o con un código (letra, número o color), luego se agrupan los diversos temas identificados y se buscan conceptos amplios que los incluyan, Así se simplifica el manejo de grandes cantidades de información.

7- Desarrollo del Pensamiento.
A este importante aspecto corresponden los numerales: 14,16, 21, 22, 28, 29, 31, 35, 39, 41, 44, 45, 46, 50. Si su valoración no le favorece en estos aspectos, sus procesos de pensamiento crítico no son sobresalientes. Al leer y al escribir las personas ponen en acción su capacidad de pensar, este es un proceso intelectual complejo, no es algo mecánico, implica ser propositivo, identificar puntos de vista, opiniones, argumentos, saber defenderse con ideas o controvertir a otros con planteamientos novedosos, sustentados. Ser reconocido como persona de pensamiento propio, autónomo.

ALTERNATIVAS: Superar la idea de leer como excelente pronunciación de las palabras y las oraciones de un escrito. Entender la lectura como proceso de pensamiento y expresión de ideas e ideologías. Leer es un diálogo entre el autor y el lector para construir un pensamiento. Uno como lector le aporta al texto sus saberes previos, sus comprensiones y experiencias anteriores para darle sentido. El pensamiento se desarrolla si establecemos relaciones entre las ideas del texto, entre ellas y la vida, también con la realidad, con otros temas, con otros escritos. Así diferenciamos los hechos de las opiniones y los argumentos de las valoraciones superficiales. Pensar es preguntarnos por el por qué y el para qué de las cosas, y de las ideas. Ver o prever las causas y consecuencias de cada situación, los intereses que están implícitos en todo, las ideologías que nos influyen, ver lo invisible, interpretar el silencio, lo ausente, lo no dicho. Cuando se hace preguntas es porque está pensando y cuando no tiene preguntas es porque está haciendo una tarea por encargo, en beneficio de otro, no tiene interés en transformarse ni en transformar la realidad. No piensa solo hace lo que otro le indica.

La escritura también es un acto del pensamiento, quien escribe está pensando. Pero en el sentido tradicional la escritura es fundamentalmente caligrafía y buena ortografía, es decir el interés es la forma, exclusivamente. Otros piensan y redactan y quienes tienen buena letra copian al dictado las ideas. Si se asocia escribir con pensar se le da importancia al contenido de la redacción de un escrito y también a la forma de su presentación. Pero lo más importante es saber qué escribir, cómo estructurar el desarrollo del escrito, cómo sustentarlo para hacerlo creíble.

ARTICULO DE DANIEL CASSANY SOBRE LA ESCRITURA

ACTITUDES Y VALORES SOBRE LA COMPOSICIÓN ESCRITA[3]

Hoy tenemos el gusto de presentar un artículo de Daniel Cassany, realizado de manera exclusiva para la edición No 40 de la Revista Alegría de Enseñar. Este escritor e investigador español es ampliamente reconocido en nuestro medio por su libro La cocina de la escritura, un manual de redacción que rompe los esquemas con los que se han manejado este tipo de textos. En esta ocasión Cassany presenta algunas de sus tesis fundamentales alrededor de este importante tema y señala algunos consejos prácticos para enseñar a escribir.

El artículo comenta algunas opiniones, creencias y puntos de vista que la sociedad tiene sobre la escritura y que son erróneos, llenas de prejuicios e incluso perjudiciales para la práctica de la composición.


1. LA ESCRITURA COMO TECNOLOGÍA DECADENTE EN EL MUNDO MODERNO

La explosión de los medios de comunicación de masas y especialmente de los canales audiovisuales (telefonía, televisión y radio), inducen a pensar falsamente que la escritura está perdiendo terreno. Los adultos, y también el profesorado, piensan que cada día se escribe y lee menos, que la interacción oral está sustituyendo la escrita (las conversaciones telefónicas a las cartas), que los poderosos medios de comunicación de masas están matando a la escritura y, en definitiva, que lentamente la sociedad está desalfabetizando. El aprendiz todavía percibe con más intensidad esta sensación, siente que lo moderno son los nuevos formatos audiovisuales (TV, cine y videos), mientras que la escritura resulta una tecnología vieja, pasada de moda y con poco futuro. En general, no se escribe hoy menos que ayer, sino que se escribe de manera distinta:

Las necesidades de comunicación escrita de las personas han cambiado. Hoy los adultos escribimos para la familia o los amigos (cartas, diarios íntimos, notas e invitaciones.) y más para el trabajo (informes, proyectos, etc.) y para la formación continuada (resúmenes, comentarios, apuntes, etc.…) Los niños y los jóvenes por lo general sólo escriben en la escuela y escriben textos ( exámenes, apuntes, esquemas, fichas) con características lingüísticas muy particulares: tema especializado, terminología técnica, referencia a otros textos, registro elevado, entre otros. Esta consideración tiene mucha importancia para la enseñanza de la redacción en niveles intermedios y superiores, porque significa que los tipos de textos que tiene que escribir el alumnado y que deberían ser, pues, objeto de enseñanza son los académicos y no los familiares.

También crece el uso de la escritura en el ámbito laboral y en el civil administrativo: la escritura es una forma de desarrollar y regular el trabajo (informes, archivos, actas de reuniones, expedientes, etc.…) y es también una manera de controlar y organizar la sociedad (es la llamada burocracia: instancia, informes, certificados, impresos).

En conjunto, es falso que la escritura está perdiendo importancia, aunque muchas personas tengan esta impresión. Los avances tecnológicos están cambiando los usos comunicativos, pero la escritura continúa siendo un instrumento imprescindible para sobrevivir en la sociedad moderna. El problema radica en la “imagen” que ofrece el centro educativo de la escritura, que resulta notablemente anticuada respecto al uso real extraescolar.
En el aula el aprendiz redacta textos que resultan inútiles para sus necesidades, sobre temas de humanidades, quizás alejados de su interés personal, y además debe hacerlo solo. Con este enfoque no resulta raro que éste crea que la escritura es anticuada y está desconectada de la realidad.

Para seguir siendo útil, la redacción debe adaptarse a los cambios tecnológicos y sociales, que a experimentados la escritura en los últimos años. Deber poner más énfasis en los textos académicos, enfocar la composición como una tarea socializada y cooperativa, y, en definitiva, evolucionar al ritmo que cambia la sociedad. Sólo de este modo el alumnado tendrá la sensación de que está aprendiendo algo actual, aplicable a su realidad.

2. LA ESCRITURA COMO PRÁCTICA HUMANISTICA MISTIFICADA

La sociedad asocia la práctica de la escritura con la creación literaria y con el ámbito de las letras o de las humanidades. El significado que damos a la palabra escritor/a lo demuestra: se refiere a un novelista, a un poeta o quizás mucho menos a un dramaturgo; pero nunca a un científico que escribe artículos en revistas de investigación o de divulgación, a un auditor que elabora informes o a un medico que redacta el protocolo de un enfermo. Esa representación reduccionista e incluso mistificada de la escritura es la causa de varios prejuicios:
- Se olvida que muchos profesionales usan la escritura como instrumento fundamental de su actividad: abogados y jueces que escribe leyes, demandas y sentencias; economistas, informáticos y químicos que escribe informes; administrativos, relacionistas públicos y comerciales que redactan cartas, publicidad, prospectos, etc. También se olvidan las comunicaciones escritas de carácter técnico, científico o comercial, las cuales tienen un papel muy importante en el mundo actual; normas, instrucciones de uso, libros de texto, manuales, cartas comerciales, etc.
- Al ser la escritura una actividad reservada a los literatos, se la percibe con cierta lógica aparente como una actividad artística, que requiere “inspiración” y mucho talento personal. De este modo, se pieza ingenuamente que no se puede enseñar ni aprender a escribir, porque es una especie de don artístico e innato.
- Con la asociación entre escritura y literatura, ésta queda reducida a las formas escritas, a los libros publicados. Se olvida que en sus orígenes la literatura fue oral y que también son literatura, con grados variados de interés y calidad, los cuentos infantiles, las tradiciones orales populares, las películas de cine que tienen una parte verbal o los culebrones de televisión.

En definitiva, esta visión reduccionista de lo que es la escritura transmite de manera socarrona algunos prejuicios que entorpecen el desarrollo de las habilidades escritas, la lectura y la escritura. Muchos estudiantes de ciencias llegan a creer erróneamente que ellos no tienen que estudiar lengua, porque “quiero ser químico” o porque “voy a estudiar medicina” y los profesionales técnicos y científicos no tienen que escribir.


3. LO ESCRITO COMO PRODUCTO ESTÉTICO Y CONCLUSO.

Otra opinión relevante de la escritura es su concepción como producto físico, finito y estético, que implica el desinterés por el proceso dinámico con que se construye. Al contrario, escribir es un proceso complejo que incluye actividades cognitivas y lingüísticas complejas, que se desarrollan desde que surge la primera intensión de escribir hasta que se consigue la versión final. Lo escrito es solo la punta del iceberg, cuya mayor parte de hielo sigue escondido bajo la superficie:

- Los escritores sólo difunden las versiones finales de sus textos y los lectores también se interesan sólo por éstas. Se destruye el material intermedio producido durante la composición (listas, esquemas, borradores, notas, apuntes, correcciones). Se conservan pocos borradores de obras literarias y no existe especial interés por leerlos o estudiarlos. Resulta paradójico destacar que esto no ocurra en otras áreas culturales como la arquitectura, la pintura, la escultura, el teatro, en las que el proceso de elaboración merece atención especial y se conservan las producciones intermedias (planos, maquetas, dibujos, bocetos, grabaciones de ensayos, etc.)

- La consideración social del material intermedio es negativa. Los textos con tachaduras, correcciones o rectificaciones se consideran sucios, torpes e incluso vergonzosos. ¡además de connotar dejadez y poca aplicación por parte del autor!

Los puntos anteriores fomentan la idea de que los escritos publicados no tienen ni tuvieron versiones provisionales intermedias y de que sus autores los generaron de manera espontánea, sin esfuerzo, directamente en su versión conocida. El estudiante raramente tiene la oportunidad de observar un autor en acción, produciendo bocetos, equivocándose, rectificando, etc. Al carecer de modelos reales o verosímiles de composición y al conocer sólo escritos terminados, los estudiantes creen que escribir es como hablar, que corregir un texto es malo, que uno no se puede autocorregir, que debe conseguir su escrito en una única redacción, etc.

4. LA ESCRITURA COMO ACTIVIDAD INDIVIDUAL Y PRIVADA

Suele considerarse que escribir es una actividad fundamentalmente individual y privada, aunque sea la única habilidad lingüística que pueda elaborarse en colectividad y aunque seamos seres sociales y vivamos estructurados en organizaciones (familia, asociaciones, empresas, instituciones, etc.):
- Muchos escritos publicados tienen autoría individual. Eso es corriente en literatura, hasta el punto de que una obra de dos o más autores se considera rara. Pero en el ámbito científico, en el técnico y en el laboral, cada día es más habitual que los textos sean el resultado de la cooperación entre muchas personas especializadas en áreas diferentes.
- La práctica más corriente de la escritura es la aislada y silenciosa. Pervive todavía esa imagen romántica del escritor aislado del mundo, solo, que escribe “a escondidas” de su prójimo, que raramente explica l0o que hace y que destruye sus producciones intermedias cuando termina la versión final. En esta misma línea deben entenderse las reticencias que adolescentes y adultos muestran al tener que comentar un texto de un compañero o al escuchar las opiniones que tienen otros sobre las propias producciones.

Como resultado se cree que en el aprendiz se debe escribir sólo y que es malo que comparta con sus compañeros su activad mental de composición. La voz popular incluso opina que coescribir un texto con otro es una tarea compleja, difícil e incluso “latosa”, por lo que resulta más fácil y rápido hacerlo individualmente.

5. LA SOBREVALORACION DE LA ORTOGRAFÍA

Para que un texto sea válido socialmente debe cumplir varias propiedades lingüísticas: en la superficie debe respetar las convenciones normativas establecidas (ortografía, presentación, etc.),debe usar una estructura gramatical de la lengua y debe tener cohesión; en la profundidad, debe seleccionar la información apropiada (coherencia) para que el propósito comunicativo, debe estructurarla de acuerdo con el tipo de texto y su estructura discursiva (macroestructura y superestructura), o debe usar las fórmulas y las palabras adecuadas a la situación comunicativas (adecuación).

Todas estas propiedades tienen la misma importancia en el texto. Pero el valor social que se atribuye a cada una es distinto. Nos fijamos mucho más ¡a veces únicamente! en la gramática y la ortografía que en el resto de propiedades, a causa de la educación básicamente ortográfica y prescriptiva que recibimos. Por ejemplo las correcciones que realiza el profesorado en le texto del aprendiz suelen referirse en su mayoría a los aspectos superficiales (ortografía, reglas de gramática, interferencias lingüísticas, etc.) y en menos ocasiones a los profundos (selección de datos, estructura).

Esta valoración desequilibrada provoca que el estudiante se preocupe sólo de las cuestiones más superficiales y que desatienda el resto. Tiende a pensar que como el profesor sólo va a corregir las faltas de gramática, que no vale la pena dedicar tiempo a desarrollar el contenido del texto (ideas, estructuras, etc.), porque no los va a tener en cuenta. De esta manera los estudiantes llegan a conseguir escritos muy correctos, pero incoherentes o vacíos.

6. LO ESCRITO COMO TEXTO COMPLEJO

La masificación de la escritura y la historia política y sociocultural de las comunidades hispanas, son posiblemente dos de las causas de que se crea que es mejor un texto complejo y difícil que otro llano y comprensible:

- Nuestra comunidad lingüística está constituida en parte con documentos inaprehensibles para la gran mayoría de la ciudadanía. Muchas personas no entienden las leyes que gobiernan sus vidas, las instrucciones de los aparatos que usan, sus contratos de propiedad y seguros, etc., porque están escritos con la jerga burocrática o técnica, alejada del lenguaje corriente. Aunque estos textos tengan síntesis compleja, terminología especializada, impersonalidad y un grado de abstracción semántica muy alto, que dificulta su comprensión, la ciudadanía cree que es lógico que así sea, puesto que tratan de temas “altos” o “complejos”. Así lo difícil queda legitimado e incluso se convierte en un modelo a seguir.

Está bastante extendida la idea de que lo comprensible y sencillo transmite ideas menos valiosas o poderosas que lo complejo y hasta cierto punto incomprensible. El abuso del discurso críptico o vacío sufrido durante épocas de dictadura de opacidad comunicativa, fomenta que las personas se representen lo ininteligible como probablemente superior a lo accesible.

En el aula, muy pronto el aprendiz se contagia de esta valoración positiva de la dificultad y tiende a escribir con palabras difíciles y construcciones complejas. Así no sólo se complica el autor su propia tarea de escribir, sino que se la complica también al lector, que tendrá más dificultades para comprender algo que posiblemente se hubiera podido expresar de un modo más llano. No hay razón alguna para valorar lo difícil por encima de lo fácil. La lengua es bastante versátil y rica para poder expresar de forma sencilla cualquier significado.

En resumen, podemos concluir que las representaciones que la sociedad ha desarrollado sobre la escritura distan peligrosamente de los usos reales. El redactor tiende a creer que ésta es una tecnología en declive, asociada con el mundo de las letras, que se manifiesta en forma de producto acabado y elaborado con registro elevado y complejo, que elabora individualmente y en privado y que tiene mucho de artístico, en consecuencia, de mágico e inalcanzable. Al contrario, la investigación y la evolución lingüística nos muestran la escritura como una práctica moderna, relacionada con todas las disciplinas del estudio, con una dimensión cognitiva y discursiva importante, que puede acercarse a los usos más generalizados de la lengua y que tiene una parte técnica que puede ser enseñada y aprendida con educación adecuada.

Para terminar acabamos con un decálogo didáctico de la composición que permite fomentar actitudes más positivas hacia ésta:

DECÁLOGO DIDÁCTICO DE LA COMPOSICIÓN

1. EL APRENDIZ ESCRIBE EN CLASE
El docente suele suponer que se emplea mejor el tiempo de la clase explicando reglas gramaticales y estudiando el libro de texto, mientras que la práctica de la composición ¡al ser una tarea individual y silenciosa! puede realizarla el aprendiz en su casa como deberes de la asignatura. De esta forma no sólo impedimos que el sujeto pueda realizar sus procesos de escritura y que aprenda de otros, sino que estigmatizamos la habilidad de escribir con todas las connotaciones negativas (aburrimiento, soledad, obligación) que tienen los deberes.

2. EL APRENDIZ ESCRIBE COOPERATIVAMENTE: COLABORA CON OTROS
Las tareas de escritura deben fomentar la interrelación entre los aprendices. Si aceptamos que el lenguaje es social y que se adquiere y desarrolla a partir de la interacción con la comunidad, las tareas deben fomentar la ayuda entre aprendices. Los compañeros pueden ayudar a un autor aprendiz a buscar ideas, a organizarlas, a revisar los borradores, etc.

3. EL APRENDIZ HABLA DE LO QUE ESCRIBE CON COMPAÑEROS Y DOCENTES
Hablar y escuchar, conversar, interactuar es el principal instrumentos de aprendizaje. La interrelación entre los aprendices y el docente se realiza fundamentalmente con el habla, de modo que de ninguna manera debe prohibirse y reprimirse el habla sobre composición o sobre el escrito. Los coautores o los compañeros pueden intercambiar ideas sobre el texto, su proceso de composición, su planificación, su textualización, etc.

4. EL APRENDIZ LEE LO QUE ESCRIBE, CON OBJETIVOS Y PROCEDIMIENTOS DIVERSOS
La lectura también forma parte del proceso de la escritura. El autor debe leer sus producciones intermedias en clase (esquemas, borradores, revisiones, etc.) con mucha más atención y reflexión de la que utiliza para leer los escritos sociales corrientes: periódicos, libros de texto, cartas. Cuando se lee lo que se está escribiendo, no sólo debe entenderse su significado, sino que debe verificarse que éste concuerde exactamente con el que uno había pensado o deseado que tuviera. La mejor forma de desarrollar las interpretaciones que los autores aprendices hacen de sus propios textos en proceso de composición es hablar de ellas con sus compañeros.

5. EL APRENDIZ TOMA RESPONSABILIDADES SOBRE SU ESCRITO: SE AUTOREGULA
Decidir qué se quiere escribir, cómo se va a escribir, cómo se va a corregir, corregir lo que se escribe, etc., forma parte del proceso de escribir. Las tareas de escritura deben permitir que el aprendiz tome decisiones sobre su escrito. Las consignas excesivamente detalladas lo inhiben de la necesidad de apoderarse del discurso.

6. EL APRENDIZ USA MATERIALES Y RECURSOS CONTEMPORÁNEOS
El aula donde escribe el aprendiz debería disponer de los recursos (diccionarios, gramáticas, enciclopedias, computadores) más corrientes en el uso del escrito social.

7. EL DOCENTE ESCRIBE EN EL AULA: EN PÚBLICO, ANTE LA CLASE, CON EL APRENDIZ
La composición es una actividad fundamentalmente cognitiva, que además de conocimientos requiere técnicas. La mejor manera de aprenderlas es poder “ver” a un experto que las ejemplifica, “participar” con un experto en la producción de un texto en una situación comunicativa real. El docente es el mejor experto que podemos encontrar en el aula y, por esta razón, debe ponerse a escribir con sus estudiantes, escribiendo su propio texto frente a ellos, ejemplificando el funcionamiento de una técnica, ayudando a sus estudiantes a desarrollar su propio texto, etc.

8 EL DOCENTE ACTÚA COMO LECTOR, COLABORADOR, ASESOR, Y NO COMO ÁRBITRO, JUEZ O JEFE.
La mejor ayuda que puede ofrecer el docente al aprendiz de escritura es leer los textos y reaccionar como si fuera un lector experto, explicando al autor lo que entendió, lo que no entendió, las impresiones y las sorpresas que le trajo el proceso de la lectura del texto del estudiante, etc. Este tipo de respuesta o “corrección” resulta mucho más formativa que el ejercicio más directo y opaco de la autoridad (esto está bien, esto está mal), que quizás especifica lo que el estudiante debe hacer, pero no ofrece explicaciones satisfactorias al autor sobre su texto.

9 QUEDA PROHIBIDO TIRAR O DESTRUIR PRODUCTOS INTERMEDIOS
Prestar atención a las producciones intermedias (listas, esquemas, borradores, etc.) fomentar la concepción de que la escritura es mucho más que el producto final, que abarca todo el proceso de elaboración y textualización del significado.

10. ESCRIBIMOS SOBRE TODOS LOS TEMAS PARA HACER Y CONSEGUIR COSAS QUE NOS INTERESEN
La técnica de la escritura abarca todas las materias y todos los rincones de la comunidad humana. Escribir puede ser una forma de elaborar el conocimiento disciplinario, científico y humanista, si se utiliza de modo eficaz siguiendo estos consejos.